Años más tarde, pude formular interrogantes
precisas: ¿Qué ministerios puede ejercer una mujer? ¿Cómo se hace la distinción
entre lo que puede y no puede hacer? Descubrí que otros se preguntaban cosas
parecidas: ¿Puede una mujer legítimamente ser ordenada al ministerio pastoral?
De ser así, ¿sobre qué base? Si no, ¿por qué no? Al fin de cuentas, ¿qué
significa la ordenación?
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
1 comentarios:
LEÍ ESTE LIBRO MARAVILLOSO Y ES SENCILLAMENTE FENOMENAL, FELICITAMOS A NUESTROS QUERIDOS HERMANOS QUE SE HAN TOMADO EL TIEMPO PARA EDITARLO.
Publicar un comentario